Náuseas y vómitos persistentes

Náuseas y vómitos persistentes son síntomas de malestar estomacal y expulsión forzada, que si duran días, indican una posible enfermedad subyacente que requiere atención.

Descripción

Las náuseas y vómitos persistentes son síntomas que, aunque comunes, pueden ser indicativos de condiciones médicas significativas que requieren atención. Las náuseas son la sensación de malestar estomacal con la urgencia de vomitar, mientras que el vómito es la expulsión forzada del contenido del estómago. Cuando estos síntomas son persistentes, es decir, duran más de unos pocos días o son recurrentes, pueden llevar a deshidratación, desequilibrios electrolíticos y ser una señal de alerta de una enfermedad subyacente que podría requerir intervención quirúrgica. Mi trabajo es identificar la causa subyacente para poder ofrecer el tratamiento más adecuado.

Causas

• Infecciones gastrointestinales: viral, bacteriana o parasitaria
• Problemas de la vesícula biliar: cálculos o inflamación (colecistitis)
• Obstrucción intestinal: un bloqueo físico en el paso de alimentos
• Apendicitis: especialmente en etapas avanzadas
• Pancreatitis: inflamación del páncreas
• Reflujo gastroesofágico severo (ERGE)
• Úlcera péptica
• Ciertos medicamentos: quimioterapia, antibióticos, opiáceos
• Embarazo (hiperémesis gravídica)
• Trastornos metabólicos o endocrinos: diabetes no controlada

Condiciones Relacionadas

• Colelitiasis y colecistitis: piedras e inflamación de vesícula
• Obstrucción intestinal: bloqueo del tracto digestivo
• Apendicitis aguda: inflamación del apéndice
• Pancreatitis: inflamación del páncreas
• Úlcera gástrica perforada: perforación de úlcera estomacal
• Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE)
• Peritonitis: inflamación del peritoneo
• Abscesos intraabdominales: colecciones de pus

Consejos de Manejo

• Mantener hidratación con pequeños sorbos frecuentes
• Evitar alimentos sólidos hasta que mejoren los síntomas
• Buscar atención médica si persisten más de 24 horas
• No tomar medicamentos sin supervisión médica
• Observar signos de deshidratación
• Buscar atención urgente si hay sangre en el vómito

Complicaciones

• Deshidratación: pérdida de líquidos corporales
• Desequilibrio electrolítico: alteraciones en sodio, potasio, cloro
• Desnutrición y pérdida de peso
• Daño al esófago: por la acidez del vómito repetido
• Aspiración pulmonar: inhalación de contenido gástrico a los pulmones
• Mayor riesgo de complicaciones si hay enfermedad subyacente grave